La revisoría fiscal es una institución fundamental en el entramado empresarial colombiano, concebida para ejercer un control y fiscalización rigurosa sobre la operación de las compañías. Esta figura, que solo puede ser desempeñada por un profesional de la contaduría pública, va más allá de la simple auditoría; implica una vigilancia constante y obligatoria en ciertas empresas, garantizando la transparencia, la legalidad y el cumplimiento normativo.
A diferencia de un auditor tradicional, cuya intervención puede ser puntual, el revisor fiscal tiene una presencia continua y debe asegurar que las operaciones de la empresa se ajusten a las prescripciones legales, estatutarias y a las decisiones de los órganos de dirección. Su labor es esencial para brindar confianza a los accionistas, terceros y al Estado sobre la veracidad de la información financiera y la gestión de la entidad.
Las funciones del revisor fiscal están claramente definidas por la legislación colombiana, principalmente en el Código de Comercio y la Ley 43 de 1990. Estas funciones abarcan un amplio espectro de actividades destinadas a asegurar el correcto funcionamiento de la empresa desde una perspectiva financiera, contable y legal. A continuación, se detallan las funciones esenciales:
Una de las responsabilidades primordiales del revisor fiscal es la supervisión y control de la información financiera. Esto implica un examen detallado y crítico de los estados financieros para verificar su exactitud y veracidad. El revisor fiscal debe asegurarse de que los libros contables reflejen fielmente las transacciones y que se adhieran a los principios contables generalmente aceptados.
El revisor fiscal evalúa la razonabilidad de los estados financieros, emitiendo un dictamen profesional que certifica si estos presentan de forma fidedigna la situación financiera y el estado de resultados de la empresa. Esta opinión independiente es crucial para la toma de decisiones de los diversos grupos de interés.
El revisor fiscal realiza auditorías internas y externas para evaluar la efectividad de los sistemas de control interno de la empresa. Esto incluye la inspección de documentos, la realización de arqueos de caja periódicos (al menos trimestrales) y la verificación de la adecuada conservación de los activos de la sociedad.
El revisor fiscal tiene la responsabilidad de velar por el cumplimiento de las disposiciones legales, los estatutos sociales y las decisiones de la asamblea de accionistas o junta de socios. Esto implica asegurarse de que las operaciones de la empresa se celebren o cumplan conforme a la normativa vigente.
Debe cerciorarse de que la entidad cumpla con todas las leyes que le son aplicables, identificando posibles riesgos legales y recomendando los correctivos necesarios.
Una función crítica es la de dar oportuna cuenta a los administradores o a la asamblea o junta de socios, según los casos, de las irregularidades que ocurran en el funcionamiento de la sociedad y en el desarrollo de sus negocios. Esta comunicación debe ser pronta y clara para permitir la corrección temprana de problemas.
El revisor fiscal actúa como un enlace entre la empresa y diversas entidades de control y vigilancia. Además, su firma otorga fe pública a ciertos documentos.
Debe colaborar con las entidades gubernamentales que ejerzan la inspección y vigilancia de las compañías, proporcionando la información que requieran. Esto incluye reportar operaciones sospechosas a la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF) cuando advierta situaciones relacionadas con el lavado de activos o la financiación del terrorismo.
El revisor fiscal está facultado para autorizar con su firma inventarios, balances, cheques y demás documentos que sean necesarios. También emite certificaciones e informes sobre los estados financieros y otros aspectos relevantes de la gestión empresarial.
Equipo de revisoría fiscal colaborando en la revisión de documentos.
La labor del revisor fiscal conlleva consigo importantes responsabilidades, tanto legales como profesionales. El incumplimiento de sus funciones o la actuación negligente pueden acarrear consecuencias significativas.
El revisor fiscal puede ser considerado responsable de los perjuicios que ocasione a la sociedad, a sus asociados o a terceros por negligencia o dolo en el cumplimiento de sus funciones. Esta responsabilidad se manifiesta en distintos ámbitos:
Se deriva de los daños económicos causados por su actuación u omisión. El artículo 211 del Código de Comercio establece claramente esta responsabilidad.
Puede incurrir en responsabilidad penal por la comisión de delitos, como suministrar datos contrarios a la realidad, expedir constancias o certificaciones falsas, u ordenar, tolerar, hacer o encubrir falsedades en los estados financieros.
La negligencia o el cumplimiento irregular de sus funciones, así como la falta a la reserva profesional, pueden dar lugar a sanciones administrativas por parte de la Junta Central de Contadores, incluyendo la cancelación de su matrícula profesional o la imposición de multas.
Es crucial que el revisor fiscal actúe siempre con independencia y exento de cualquier subordinación, basando su criterio en la ley, la ética profesional y su conciencia social.
Representación visual del proceso de fiscalización llevado a cabo por el revisor fiscal.
El revisor fiscal desempeña un papel fundamental en la prevención y detección de actos de corrupción, lavado de activos y financiación del terrorismo. La legislación colombiana le ha otorgado responsabilidades específicas en esta materia.
La Ley 2195 de 2022 modificó la Ley 43 de 1990 para establecer la obligación del revisor fiscal de denunciar ante las autoridades competentes los actos de corrupción, delitos contra la administración pública, el medio ambiente, el orden económico y social, la financiación del terrorismo y de grupos de delincuencia organizada que detecte en el ejercicio de su labor.
Una novedad importante introducida por la Ley 2195 de 2022 es la obligación del revisor fiscal de valorar y emitir una opinión sobre los Programas de Transparencia y Ética Empresarial (PTEE) implementados por las entidades obligadas a tenerlos.
La responsabilidad del revisor fiscal en estos casos llega hasta el momento en que descubre y reporta las irregularidades a los organismos competentes. No tiene facultad para tomar decisiones que cambien las situaciones irregulares, sino que debe informar y sugerir posibles correctivos.
Aunque ambos roles comparten similitudes en cuanto a la revisión de información financiera, existen diferencias cruciales que distinguen al revisor fiscal del auditor.
El revisor fiscal es una figura obligatoria en ciertas empresas colombianas de acuerdo con la legislación, y su función es permanente y continua. Por otro lado, la auditoría puede ser interna o externa, y se centra en análisis específicos en intervalos de tiempo determinados, no siendo siempre obligatoria.
Mientras que un auditor puede ser contratado para realizar un análisis puntual de un área específica, el revisor fiscal tiene un mandato legal para fiscalizar de manera integral la operación de la empresa, asegurando el cumplimiento de las normas y la transparencia de la información financiera.
Aunque la responsabilidad final recae en el revisor fiscal designado, este profesional puede conformar un equipo de trabajo para llevar a cabo sus funciones de manera eficiente, especialmente en organizaciones de mayor tamaño y complejidad.
El revisor fiscal o la firma de auditoría que presta el servicio debe seleccionar el personal adecuado para el encargo, considerando la complejidad de la entidad y los riesgos asociados. El equipo puede estar integrado por contadores, auditores y otros especialistas que colaboren en las diversas tareas de fiscalización y aseguramiento.
Es importante destacar que la responsabilidad sobre el trabajo realizado por el equipo recae en última instancia en el revisor fiscal principal, quien debe supervisar y validar el trabajo de sus colaboradores.
Este video aborda la conformación del equipo de trabajo de un revisor fiscal, un aspecto clave para llevar a cabo una revisoría eficaz, especialmente en organizaciones complejas donde se requiere la colaboración de diversos profesionales.
Si bien existen funciones generales para el revisor fiscal, sus responsabilidades pueden variar ligeramente dependiendo del tipo de sociedad o institución.
En el ámbito de la propiedad horizontal, el revisor fiscal juega un papel crucial en la fiscalización de los recursos y la gestión administrativa de la copropiedad. Sus funciones incluyen verificar la contabilidad, supervisar el cumplimiento de las normas internas y externas, y asistir a las asambleas para rendir informes.
En este tipo de entidades, el revisor fiscal debe asegurarse de que las operaciones relacionadas con los contratos estatales se realicen de manera transparente y de acuerdo con la normativa de contratación pública.
Para una mejor comprensión de las funciones del revisor fiscal, presentamos un cuadro comparativo de algunas de sus responsabilidades clave:
Función Principal | Descripción Detallada | Base Legal (Ejemplo) |
---|---|---|
Fiscalización Financiera | Verificar la exactitud y veracidad de los estados financieros y la contabilidad. | Código de Comercio, Art. 207 |
Cumplimiento Normativo | Asegurar que la empresa cumpla con las leyes, estatutos y decisiones de los órganos de dirección. | Código de Comercio, Art. 207; Ley 43 de 1990 |
Reporte de Irregularidades | Informar oportunamente a los administradores o socios sobre actos ilícitos o situaciones irregulares. | Código de Comercio, Art. 207; Ley 2195 de 2022 |
Colaboración con Entidades de Control | Proporcionar información a las autoridades gubernamentales que ejerzan inspección y vigilancia. | Código de Comercio, Art. 207; Ley 1474 de 2011 |
Emisión de Certificaciones | Autorizar con su firma documentos contables y financieros. | Código de Comercio, Art. 207 |
Evaluación del Control Interno | Examinar y evaluar la efectividad del sistema de control interno de la empresa. | Normas de Aseguramiento de la Información (NIA 265) |
El revisor fiscal debe ser un profesional de la contaduría pública con un alto grado de ética, independencia y conocimiento técnico. Debe ser capaz de emitir juicios objetivos y mantener una comunicación efectiva con los diferentes actores de la empresa y las entidades externas.
La independencia es un pilar fundamental de la revisoría fiscal. El profesional debe estar libre de cualquier vínculo o influencia que pueda comprometer su objetividad en el ejercicio de sus funciones. Esto garantiza que su opinión sea imparcial y confiable.
Dada la constante evolución de la normativa contable, financiera y legal, el revisor fiscal debe mantenerse actualizado a través de formación continua y el estudio de las nuevas disposiciones que afectan su labor.
Grupo de profesionales de contaduría, perfil típico para el rol de revisor fiscal.
La revisoría fiscal tiene un impacto significativo en la gestión empresarial y en el entorno económico en general. Su labor contribuye a:
Solo los contadores públicos debidamente inscritos y con tarjeta profesional vigente pueden ejercer como revisor fiscal en Colombia.
No, la obligatoriedad de tener revisor fiscal depende del tipo de entidad y de ciertos criterios definidos en la ley, como el monto de los activos o los ingresos. Sociedades anónimas, empresas de economía mixta, cooperativas y fondos de empleados suelen estar obligados, entre otras.
El contador se encarga de llevar los registros contables y preparar los estados financieros, mientras que el revisor fiscal es un auditor externo de esos registros, encargado de verificar su exactitud y el cumplimiento normativo. El revisor fiscal da fe pública sobre la información preparada por el contador.
El revisor fiscal puede enfrentar responsabilidades civiles, penales y administrativas, incluyendo multas, la cancelación de su matrícula profesional e incluso penas de prisión en casos de dolo o falsedad.
No, el revisor fiscal debe mantener su independencia y no puede participar en las decisiones administrativas o de gestión de la empresa. Su rol es de fiscalización y control.
La independencia garantiza que la opinión del revisor fiscal sea objetiva e imparcial, brindando confianza a los usuarios de la información financiera. Cualquier vínculo que comprometa su independencia afecta la credibilidad de su labor.